Cuando
se trata de elegir si queremos un coche nuevo o de segunda mano, la cantidad de
opciones que se van abriendo a nuestro alrededor es ciertamente abrumadora.
Muchas veces no somos capaces de decantarnos por una opción o por otra porque
pensamos que, elijamos la que elijamos, al final nos equivocaremos. Por eso
vamos a repasar las ventajas que tiene cada opción, para que puedas ponerlas en
una balanza y decidir así de forma más conveniente.
Comenzaremos
con los coches de segunda mano. La primera ventaja que tienen es obvia: son
mucho más baratos y tienen una vida útil aún muy larga, sobre todo si están
bien cuidados y no presentan fallos mecánicos evidentes. Además, gracias a
páginas como www.buscoautomovilesocasion.com
es muy sencillo encontrar un stock enorme que te permita elegir marca, precio,
estado, garantía, etc. Otra de las ventajas que tienen es la posibilidad de
adquirir ese turismo que siempre hemos deseado a un precio irresistible. En
efecto, muchos son los que sueñan con deportivos de color rojo o negro
brillante, pero el precio de fábrica es prohibitivo. Pues bien, en el mercado
de ocasión los tienes más baratos, así que si tu sueño ha sido siempre conducir
uno de estos bólidos, haz una búsqueda y cúmplelo. Recuerda que si no persigues
un sueño el sueño te perseguirá a ti...
En
cuanto al mercado de coches nuevos, pensamos que las ventajas son evidentes:
son coches a estrenar, con todas las piezas relucientes y ese olor a nuevo que
emana de los plásticos, los asientos, etc. Además, resulta palmario que podremos
amoldar el vehículo a nuestras características y acostumbrarlo a nuestra forma
de conducir. Los autos recién salidos del concesionario incorporan más sistemas
de seguridad pasiva y activa, mejores frenos, elementos de estabilidad, cambios
de marcha menos buscos, más confort y habitabilidad en el interior del coche,
etc. Además, viendo cómo está el asunto de las ventas, seguro que puedes aprovechar
alguna oferta sugerente que puedan hacerte.
En
realidad, y como conclusión, podríamos decir que la decisión es más una
cuestión de dinero que de otra cosa. Si tenemos suficiente presupuesto
seguramente podremos elegir un vehículo nuevo, pero si necesitas un coche y no
tienes demasiado dinero, la opción más clara es el mercado de ocasión. Así que
echa cuentas y decídete. Y sobre todo, no te arrepientas de tu elección, sería
un error estar siempre lamentando haberte decantado por una u otra opción.
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